EL MIEDO A FRACASAR ES UNO DE LOS MAYORES ENEMIGOS DEL ÉXITO.
EL MIEDO ES EL MÁS PELIGROSO ENEMIGO DE TUS SUEÑOS.
En el Planeta Tierra vivimos actualmente unos 7.500 millones de personas, y aproximadamente sólo un 7% trabaja en lo que siempre soñó.
El resto, un 93% de las personas no lo hace debido al miedo, por culpa de ese sentimiento llamado TERROR.
Miedo a fracasar,
Miedo a ser rechazado,
Miedo a defraudar a tus familiares y amigos,
Miedo a ser incapaz de cumplir sus sueños,
¡SIMPLEMENTE MIEDO!
A pesar de que el miedo no es físico, no se puede tocar, al ser uno de los sentimientos que con mayor fuerza se pueden manifestar, al ser algo profundamente mental, se puede llegar a sentir y percibir.
Se puede sentir en tu piel, en tus huesos, a través de tu sudor frío, a través de ese dolor paralizante en el estómago, se puede sentir hasta el punto de llegar a impedirte realizar cosas que eres capaz de hacer.
Lo primero de todo debemos entender que el miedo es un sentimiento absolutamente natural, e incluso estrictamente necesario, como podremos ver a continuación, y que el miedo es algo que ni podemos ni debemos excluir de nuestras vidas.
La clave más importante con respecto al miedo es aprender a relacionarnos con él correctamente, aprovechando todas las ventajas de sentirlo y minimizando las limitaciones que nos impone.
Como bien te decía anteriormente el miedo es un sentimiento absolutamente natural e incluso necesario que garantiza nuestra integridad.
El miedo es un mecanismo de defensa que supone para nosotros una señal de alarma inequívoca de que algo está amenazando nuestro supervivencia.
Imagina por un instante que no existiera el miedo.
Se multiplicarían los accidentes diarios, puesto que las personas no encontrarían límites al riesgo hasta el punto de sobrepasar la delgada línea de la supervivencia.
La personas enfermarían habitualmente con más frecuencia porque habría desaparecido el miedo a la enfermedad y a la muerte y se multiplicarían las enfermedades provocadas por excesos de todo tipo.
Al desaparecer el miedo a la pérdida, se haría frecuente que las personas perdieran sus puestos de trabajo por no presentarse al mismo, porque “qué más da, no tengo miedo a perder mi trabajo”.
La humanidad acabaría sucumbiendo al caos y a la anarquía puesto que habría desaparecido el miedo a las consecuencias de infringir la ley.
Gracias al miedo no te acabas lanzando por un precipicio sin protección, ni acabas quemándote por coger algo excesivamente caliente.
Como puedes comprobar, el panorama es bastante desolador y nada deseable.
Se confundiría fácilmente la osadía con la valentía.
¿Lo ves?
¿Te das cuenta de que el miedo no sólo es natural, sino que también es necesario?
Una vez entendido este aspecto del miedo, conviene insistir en que lo más importante con respecto al miedo es aprender a relacionarse correctamente con él.
Desde mi punto de vista, y coincidiendo con la mayoría de expertos a los que he podido consultar sobre este tema, sólo existen 3 formas de relacionarte con el miedo.
O bien dejas que el miedo te paralice, te esclavice y acabe robando tus sueños pasándote todo el tiempo en confrontación con tus miedos, o bien te comportas como un cretino negando tus miedos, con lo que acabarás agotado, e igualmente acabará esclavizándote, o bien aprendes a convivir con tus miedos, sacando el mayor provecho de los mismos, siguiendo las recomendaciones y sugerencias que encontrarás a continuación.
Aprende a reírte de tus miedos, aprende a convertir tus miedos en una señal que te guíe a través del emprendimiento, aprende a transformar tus miedos en el más potente combustible para alimentar tu capacidad de soñar.
Suena bien distinto, ¿verdad?
Si prestas atención aprenderás a perderle el miedo al miedo.
Es sólo que necesitas aprender como engañar al cerebro.
Aprende a asociarte a tus miedos y esta asociación te hará más fuerte.
Pero además, deberás estar bien atento, puesto que a lo largo de tu vida tus miedos irán cambiando y evolucionando, conforme tú vayas avanzando en tu proceso vital de transformación.
EL MIEDO ES ABSOLUTAMENTE NECESARIO PARA QUE SIGAS ADELANTE EN LOS MOMENTOS DIFÍCILES CUANDO ERES EMPRENDEDOR.
Nuestro cerebro tiende a pensar habitualmente en lo negativo para alertarnos y protegernos del peligro que supone abandonar la zona de confort, y para ello utiliza el miedo como principal aliado.
Sin miedo no existe la transformación que implica cada proyecto de emprendimiento.
Una de las claves evidentes del éxito en cualquier proyecto reside en la capacidad de conseguir transformar el miedo natural y lógico que sentimos cuando comenzamos cualquier nuevo proyecto en el mejor combustible para seguir adelante y no rendirse.
Es absolutamente lógico sentir miedo por lo desconocido, sentir miedo por la incertidumbre que genera romper con la comodidad y seguridad que nos proporciona nuestra zona de confort, por ese motivo, y por otros muchos cuesta tanto dar ese primer paso en el emprendimiento y tomar acción, por el pánico que tenemos a lo desconocido que nos aguarda más allá de nuestra zona de seguridad.
Pero, a su vez, si has conseguido vencer al miedo en ese momento tan complicado , cuando estás iniciando un nuevo proyecto, y has sido capaz de dar ese primer paso tomando acción sin pensar en las consecuencias, a partir de ese momento, ese mismo miedo que te limitaba en un primer momento ahora te tiene que servir de punto de referencia, como si de un faro se tratara, de que vas por el buen camino, e incluso si eres capaz de transformar ese miedo en el combustible necesario para seguir adelante, aprendiendo a relacionarte con él como si del mejor compañero de viaje se tratara, entonces, si verdaderamente has conseguido evolucionar hasta este punto en tu relación con el miedo, habrás conseguido ser prácticamente invencible, habiendo transformado a tu mayor y peor enemigo en tu más fuerte aliado.
TOMA ACCIÓN SIN PENSARLO, Y NO TE PREOCUPES POR LAS CONSECUENCIAS.
PUEDES TENER MIEDO A LO QUE NO HAS INTENTADO, PERO ES IMPOSIBLE SENTIR MIEDO DE AQUELLO QUE YA HAS INTENTADO.